Colegios particulares no son garantía de buena educación
Apuesta. La mayoría de padres hacen un esfuerzo para matricular en instituciones privadas, pero el remedio parece peor que la enfermedad.
Marzo y abril son los peores meses para el bolsillo de los padres, sobre todo para aquellos con hijos en colegios privados. Es el caso de Iván Cruz, padre de una niña de cinco años que el año pasado pagó 7 mil soles como derecho de ingreso a su nuevo colegio. Si bien este año no pagará cuota de ingreso, se le viene la tasa de matrícula, S/ 800 y una cantidad similar por el primer mes de pensión.
A eso se le añade la lista de útiles escolares.
Iván sacó el cálculo y mandar a su hija al colegio le costará más de2 000 soles. Dice que la cambiaría de colegio pero siente que le dan una buena educación. Esos son los apuros de la mayoría de padres que optaron por la educación privada publicitada como la solución a todos los problemas. Pero la publicidad suele ser engañosa.
El especialista en pedagogía de la Ugel Sur, Roberto Marín, resalta que altas pensiones o cuotas no son garantía de buen servicio educativo. La Ugel Arequipa Sur recibe varias quejas sobre los colegios particulares. Los padres advierten bajos rendimientos escolares en sus planteles. Cuando quieren regresarlos a instituciones públicas, les ponen trabas, no quieren entregar documentación del estudiante como los certificados de estudios. Marín indica que lo único que el colegio puede negarse a otorgar es la constancia de estudios, esto si se adeuda algún pago a la institución; otros documentos no.
Los padres se quejan del incremento de pensiones sin aviso previo o el pedido de cuotas para festividades. El monto de pensiones en promedio se incrementa en 10% anualmente, pero estos precios no pueden ser regulados. La economía de libre mercado no lo permite. Lo que sí regula la normativa es que este precio no debe ser modificado en el año.
El especialista indicó que la Ugel puede sancionar de forma pecuniaria a los colegios, pero la mayoría de casos son derivados al Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi).
Categorías
El director del instituto Corpaidos, Alfredo Aguilar Medina, identificó que los colegios privados que han tenido mayor demanda son los preuniversitarios, pero que estos preparan a los alumnos para competir en exámenes de admisión y solo les interesa eso. No hay una educación integral.
Aguilar clasifica a los colegios en cuatro grupos, el A, B, C y D. En el primero, las instituciones cobran desde 900 soles a más, en el segundo están los colegios de 700 soles para arriba, en el C se encuentran los colegios donde se paga de 400 a más y en el D las pensiones están desde 200 soles. Estos últimos figuran en distritos alejados y mayormente son instalados en casas.
El grueso de estudiantes de centros educativos privados, que equivale al 36%, se encuentra en las instituciones de corte B, que representan un tercio de los colegios particulares en total de la región. “Normalmente los estudiantes que se encuentran en colegios en la categoría A se preparan para estudiar en Lima o el extranjero”, agregó.
Deficiencias en las estructuras de los colegios
El secretario del Sutep, Adolfo Quispe, observa que otra de las deficiencias de los colegios privados es la baja remuneración a los docentes, que pese a que deben ser sancionados por la Gerencia Regional de Trabajo, no son fiscalizados. Indica que un grueso de educadores tampoco tiene título profesional y están especializados en otras áreas, a ellos también los afectan las bajas remuneraciones.
Las infraestructuras son parte de la problemática; pues gran parte de los centros educativos no tienen los espacios requeridos para una adecuada enseñanza, como áreas recreativas o laboratorios. Quispe recuerda que por cada alumno debe haber 40 metros cuadrados de espacio, pero esto no se cumple. El dirigente asegura que continúan creándose colegios en viviendas y son poco inspeccionadas.
Fuente: larepublica.pe